La 'no final'

Por Julián Martínez
11 de abril de 2010

Difícil resumir en unas palabras todo lo vivido y sentido alrededor del clásico que presenciamos en la noche del sábado. No recuerdo haber visto un partido que no fuera una final tan trascendental y tan lleno de lecturas y consecuencias como el derby de hoy. El Real Madrid y el Barcelona se medían en la jornada 31 -a siete del final del campeonato- en una lucha por el título sin precedentes: empatados a puntos y sin un claro favorito a llevarse el título de campeón. Y para colmo, los azulgrana volvían a la escena del crimen. El crimen era el 2-6 y la víctima, el Madrid, podía tomarse merecida revancha.

En un partido marcado por la estrategia, como ya lo fuera el de la primera vuelta, Pellegrini salió derrotado en el duelo de banquillos. No importa que acabe saliendo campeón, que el proyecto esté en proceso de gestación, que hubieran bajas... En este blog se ha defendido la figura del chileno. Su trabajo y sus capacidades. Pero para el arriba firmante se le acabó el crédito. El Real hoy no supo si tener el balón o cederlo. No supo si atacar al rival de frente o esperarlo en su propia cancha. Eran los locales y no fueron capaces de hacer frente al rival directo. Los jugadores determinantes no aparecieron. ¿Dónde estuvo Cristiano? Lo he comentado en el post partido. Dió la sensación de desaparecer. De esconderse. Con el 0-1 y con el 0-2. Higuaín fue Higuaín: un futbolista nada determinante. La defensa hizo lo que pudo. El centro del campo fue insultantemente superado.

En un Barcelona bajo mínimos, Guardiola (¿quedan calificativos para este técnico?) estudió, planteó, se equivocó y rectificó. A la salida inicial de un Barça alienado con Alves de extremo supo reaccionar. Su 4-4-2 inicial con Messi en la mediapunta (solución ya comentada) tuvo problemas para sujetar el balón y ser fiel a sí mismo. Delante tenía a un Madrid con la clara consigna de no permitir ni un espacio, ni una facilidad. El Barcelona tuvo problemas para encontrarse a sí mismo. Cuando lo consiguió, Xavi (inmenso una vez más) conecto con Messi para arañar el primero de los goles.

En el segundo tiempo se repitió el guión. Esta vez Guardiola reforzó la zona de medios ante una previsible avalancha blanca. Pep se inclinó por jugar con 5 medios. Busquets y Keita en el mediocentro, Pedro y Maxwell en las alas y Xavi de mediapunta. Guardiola sabe que Leo vale por dos o tres delanteros, así que se permitió la licencia de jugar con él solo en punta. En estas llegó el segundo tanto. Ruptura de Pedro a la espalda de Arbeloa y pase magistral de Xavi. Arañado el 0-2. Hasta llegar ahí Valdés (gran partido el suyo) supo atajar las acometidas del Real. Piqué secó a Cristiano y en general, el sistema defensivo sobrevivió a la guerra del centro del campo.

Los cambios de Pellegrini no aportaron nada. Una vez más. Se sintió que los jugadores blancos eran impotentes. Como me pareció contra el Lyon. ¿Demasiada presión? ¿Falta de fe? ¿Desconfianza en su técnico? Yo esperaba mucho más del Real Madrid hoy. Creía que era su momento. El momento de dar un golpe en la mesa. ¡Qué gran decepción! Acomplejados, no fueron capaces de mostrar todas sus armas; las que ya conocemos. De ser ellos mismos. Lo que pueden ser. Lo que son.

Tal vez se pudieron aburrir un poco si fueron espectadores del encuentro. Nada mas lejos. El mayor ejercicio, el más complicado, lo ejecutó a las mil maravillas Pep Guardiola. Sin Ibrahimovic, Abidal, Henry (ya irrelevante) y con Iniesta en baja forma supo reinventarse una vez más (principal valor del preparador catalán esta temporada) para salir de la trampa planteada por Pellegrini. El Barcelona fue él mismo sin serlo. Fiel a su estilo pero con un discurso diferente. Guardiola no ganó esta vez por contenido, sino por formas. Y sinceramente creo que fue él el que ganó esta noche. Como acostumbra a hacer.

P.D: Luto riguroso en el partido por el accidente aéreo en Rusia que ha costado la vida al presidente de Polonia, Lech Kaczynski, y a decenas de altos cargos del Estado al que nos sumamos desde este blog. RIP.